Los adolescentes que utilizan con regularidad cigarrillos electrónicos tienen más probabilidades de convertirse en fumadores frecuentes o en grandes fumadores.

 

Recientemente, los científicos han debatido si los cigarrillos electrónicos ayudan a los fumadores a dejar de fumar o si actúan como puerta de entrada hacia el consumo de tabaco.

 

El nuevo estudio, publicado en la revista estadounidense JAMA, entrevistó en dos ocasiones a más de 3.000 estudiantes de 15 años en el condado de Los Angeles  durante el otoño de 2014 y la primavera de 2015 y les preguntó sobre la frecuencia con la que habían usado los cigarrillos electrónicos o fumado en los últimos 30 días.

 

En general, la frecuencia de ambos fue baja.

 

Pero de entre quienes usaron los cigarrillos electrónicos con frecuencia al inicio del estudio, tres o más días en el último mes, el 11,6 por ciento fumaron al menos un día al mes, mientras que el 19,9 por ciento se convirtieron en fumadores frecuentes seis meses más tarde.

 

En contraste, quienes nunca usaron los cigarrillos electrónicos al principio del estudio, sólo el 0,9 por ciento fumó ocasionalmente mientras que el 0,7 por ciento se convirtieron en fumadores frecuentes seis meses más tarde.

 

"La transición de los cigarrillos electrónicos al tabaquismo podría requerir una atención particular en la política de control de tabaco", dijeron Adam Leventhal de la Universidad del Sur de California y sus colegas en su documento.

 

Pero otros expertos señalaron que el estudio no puede demostrar el vínculo causal entre los cigarrillos electrónicos y el tabaquismo.