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Los derechos de autor en el mundo editorial, un debate constante

Por Télam | 7 Mayo, 2014 - 16:37
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Si bien cada autor puede ceder sus contenidos a través de plataformas gratuitas y colectivas, Ana María Cabanellas, presidenta de Cadra (Gestión Colectiva de Derechos de Autor) resaltó que "todo el mundo quiere vivir de su trabajo" y que en este momento el sector remunerado.

Promediando la 40ma. edición de la Feria del Libro en Buenos Aires, se realizó el martes la XII jornada del Derecho de Autor en el mundo editorial, donde se abrió un debate que rechaza de plano la piratería, en tiempos donde el mundo digital gana terreno y las leyes actuales van quedando rezagadas.

"Nos encontramos en un momento difícil porque todo el mundo está convencido que el derecho de autor es un bien de dominio público y que podemos hacer uso sin reconocer el trabajo de escritores y editores, es lo mismo que el que fabrica una mesa, nadie pretende que sea gratis", dijo Ana María Cabanellas, presidenta de Cadra (Gestión Colectiva de Derechos de Autor).

Si bien cada autor puede ceder sus contenidos a través de plataformas gratuitas y colectivas, Cabanellas resaltó que "todo el mundo quiere vivir de su trabajo" y que en este momento el sector remunerado "está pasando una buena época porque tanto el soporte papel como el digital están en crecimiento".

En Argentina, las ediciones digitales "están bajando mucho el precio, un promedio del 30% de descuento frente al papel. Las editoriales pequeñas tienen que mantenerse al ritmo, no se pueden quedar atrás", señaló.

Aun así, la presidenta de esta institución que protege y gestiona de manera colectiva los derechos de autor, sostuvo que ante las nuevas formas de comercialización, "las leyes van quedando rezagadas y es necesario que haya una nueva legislación".

En términos internacionales, se sancionó en 2013 el Tratado de Marrakech para facilitar el acceso a las obras publicadas a las personas ciegas, con discapacidad visual o con otras dificultades para acceder al texto impreso, sin pagar derechos de autor.

"En este tratado hay pautas de respeto, pero todavía no entró en vigencia y ahora la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual está discutiendo excepciones para las bibliotecas y para la educación. Esto recién comienza y la base es este Tratado", dijo.

Finalmente, Cabanellas instó a que "la gente piense que la gratuidad va a llevar que haya autores que no escriban, los únicos que no se equivocan son los piratas, porque copian libros que son éxitos".

Por su parte, el presidente de la Fundación El Libro, Gustavo Canevaro, llamó al debate. "Las pequeñas editoriales y actores económicos están ante el flagelo de la violación del derecho de autor. Necesitamos esta discusión en tiempos cambiantes y reflexionar para cuidar el valor de la creación y el desarrollo económico", dijo.

Para Canevaro, estas jornadas son para "encontrar la vuelta de tuerca, rechazando la piratería" entre la protección del derecho de autor y el acceso a los libros. María Elena Troncoso, directora Nacional de Acción Federal de la Secretaría de Cultura de la Nación, sostuvo a Télam que "estamos en favor en términos genéricos de la protección del derecho de autor y de la obra, después vemos los alcances de lo que se reproduce que entra en puja con el acceso libre".

"El Estado debe tender a la protección del derecho de autor, por eso hay líneas generales y excepciones", agregó. Entre estas últimas se contemplan "la enseñanza académica, bibliotecas y la reproducción individual para fines científicos, que se tutela en el Convenio de Berna (por el cual se rige la Argentina)".

La secretaría de Cultura creó el año pasado la plataforma virtual Biblioteca Federal Digital con obras de historia descatalogadas para que se puedan leer online. Si bien fue una excepcionalidad, se pagaron los derechos. "Se debía garantizar el acceso amplio a la cultura y el derecho a la obra, pero desde el rol del Estado se puede hacer, la discusión es con entes privados y asociaciones que no tienen el mismo tamaño. Allí comienzan a jugar otro tipo de cuestiones", dijo Troncoso.

"La discusión está en tapete seguimos necesitando especialistas y debates reñidos para obtener los mejores resultados", concluyó.