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Rico pero peligroso: consumo excesivo de embutidos aumenta riesgo de enfermedades cardiovasculares

Por Prensa Libre | 23 Junio, 2014 - 09:20
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Se refiere a las carnes conservadas mediante sistemas con humo, curado, salazón o adición de conservantes, como los embutidos —jamón y chorizo—, las salchichas o el tocino, ya que contienen sodio, nitratos, fosfatos y otros aditivos que elevan ese riesgo.

Un estudio efectuado en el Instituto Karolinska, en Suecia, demostró que comer muchos embutidos puede aumentar el riesgo de insuficiencia cardiaca.

La investigación llevó a la conclusión de que los hombres que comen grandes cantidades de carne roja procesada pueden tener mayor riesgo de incidencia de insuficiencia cardiaca y de mortalidad. Se refiere a las carnes conservadas mediante sistemas con humo, curado, salazón o adición de conservantes, como los embutidos —jamón y chorizo—, las salchichas o el tocino, ya que contienen sodio, nitratos, fosfatos y otros aditivos que elevan ese riesgo.

El estudio, llamado Cohort of Swedish Men, que es el primero en evaluar los efectos de la carne roja procesada separado de la carne roja no procesada, incluyó a 37 mil hombres de entre 45 y 79 años de edad, sin antecedentes de insuficiencia cardiaca, cardiopatía isquémica o cáncer.

Los participantes completaron una encuesta sobre el consumo de alimentos y otros aspectos de su estilo de vida y los investigadores les siguieron desde 1998 hasta el momento del diagnóstico la insuficiencia cardiaca, la muerte o el final del estudio, en el 2010.

Después de casi 12 años de seguimiento, los investigadores vieron que la insuficiencia cardiaca se diagnosticó en dos mil 891 hombres, y 266 murieron a causa de ese problema.

Quienes comieron más carne roja procesada —seis onzas por día o más— tenían 28% más de riesgo de insuficiencia cardiaca en comparación con los que consumían menos cantidad —dos onzas por día o menos—, tras ajustar por múltiples variables de estilo de vida.

Consejos

Es importante llevar una dieta equilibrada para gozar de buena salud.

Se sugiere evitar los embutidos y limitar la carne roja a una o dos porciones por semana, o menos.

Los nutricionistas aconsejan incluir macronutrientes —carbohidratos, proteínas y grasas— en cada tiempo de comida.

No hay que olvidar las recomendaciones nutricionales acerca de consumir de cinco a seis porciones diarias de frutas y verduras.

Hay que elegir harinas integrales en lugar de las refinadas.