Reseña

El rompecabezas simultáneo de Kundera en "La fiesta de la insignificancia"

Por Télam |  21 Octubre, 2014 - 15:58
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A través de cuatro viejos amigos, Kundera da forma a un collage narrativo, con personajes que se desplazan por París en pequeñas historias.

"La insignificancia, amigo mío, es la esencia de la existencia. Está con nosotros en todas partes y en todo momento", dice uno de los personajes de Kundera, que como el resto de los protagonistas creados por el checo, se atreve a poner en tensión desde la risa, la ironía y la parodia, pero también desde la seriedad teórica, los sentidos minúsculos y universales de la humanidad.

Después de su último rastro literario en el año 2000, Kundera reaparece con "La fiesta de la insignificancia", novela en la que compone una sátira sobre los temas que suelen convocarlo: la existencia, y las ideas que la sustentan; la sexualidad, la maternidad, las relaciones entre los hombres y la sociedad, el perdón, la burla, el humor, la masificación o la amistad.

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A través de cuatro viejos amigos, Kundera da forma a un collage narrativo, con personajes que se desplazan por París en pequeñas historias. Uno de ellos observa ombligos deambular y atraído por esos puntitos proyecta significados posibles vinculados a la sensualidad de la mujer. "Pero, ¿cómo definir el erotismo de un hombre (o de una época) que ve la seducción femenina concentrada en mitad del cuerpo, en el ombligo?", se pregunta.

Mientras Alain se cuestiona por esos ombligos idénticos que exhiben las jovencitas por las calles parisinas, otro personaje se pasea por el Jardín de Luxemburgo esperando superar el desánimo de una extensa fila de gente que, al igual que él, quiere ingresar a una exposición de Chagall. En tanto, otro miente adjudicándose un cáncer que ya lo abandonó y no sabe por qué pero tampoco se arrepiente de hacerlo.

Como un rompecabezas simultáneo, se suman un actor desocupado que -para ponerle un poco de escenario a su trabajo de camarero- se comunica únicamente en lengua pakistaní; una mujer que quiere suicidarse pero asesina al hombre que intenta salvarla, y Charles, un hombre que lee las memorias de Nikita Jruschov y comparte con sus compañeros anécdotas de Stalin.

Kundera nació en 1929 en Brno (República Checa) y en 1975 se radicó en Francia, luego de exiliarse tras la invasión de la Unión Soviética a su país. Desde entonces vive en París, donde siguió escribiendo narrativa, ensayo, teatro y poesía.