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AltaRoma lució propuestas que fueron desde lo onírico hasta los diversos rincones de África

Por LifeStyle / Xinhua | 3 Febrero, 2015 - 10:03
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Antonio Grimaldi, el diseñador libanés Rani Zakhem, los italianos Sabrina Persechino y Renato Balestra, además de Salvatore Piccione, fueron algunos de los destacados profesionales del mundo de la moda que estuvieron presentes en la destacada pasarela italiana.

Las transparencia y los diseños animal print fueron algunos de los elementos que sorprendieron en el desfile AltaRoma AltaModa 2015, que se llevó a cabo en Roma, Italia, con el fin de presentar las colecciones para la temporada primavera-verano 2015.

Antonio Grimaldi, el diseñador libanés Rani Zakhem, los italianos Sabrina Persechino y Renato Balestra, además de la marca Piccione, de Salvatore Piccione, fueron algunos de los destacados profesionales del mundo de la moda que estuvieron presentes en la pasarela italiana.

Antonio Grimaldi

Una pasarela cubierta de pétalos de flores fue el escenario sobre el cual Antonio Grimaldi presentó su propuesta, la que se centró en colores pasteles y telas volátiles, las cuales evocaban la brisa suave de verano, resaltando el aspecto femenino de los diseños.

Flores y hojas en relieve e hilo bordado en organza preciosa, gasa iridiscente y a todo volumen, fueron parte de esta colección.

Las creaciones contemplaron tanto vestidos largos como cortos, pero la gran mayoría daba paso a los vuelos y pliegues, dándole así un aire más onírico a la colección, que también contempló vestidos de novia.

Rani Zakhem

África fue el hilo conductor de la propuesta del diseñador libanés Rani Zakhem, quien pasó su infancia en ese lugar que le dejó tan buenos recuerdos.

En esta propuesta, la paleta de colores es intensa, por lo que la pasarela se llenó de energía. Las flores Bouganville inspiraron los colores que fueron del púrpura al coral y del rojo al fucsia. El turquesa, azul oscuro y el negro evocan el Océano Índico, así como el vestido de noche de encaje oscuro que simula los movimientos de las olas en el mar.

Dentro de esta colección no podía quedar fuera la influencia de la sabana, donde los colores tierras, chocolate, bronce, cobre y dorado fueron elementos centrales. También destacaron los vestidos de gasa de seda con estampados de animales, joyas de estilo 3D Masai y las telas brillantes.

Zakhem dejó para los vestidos de novia la inspiración de las nieves del Kilimanjaro. Su propuesta contemplaba un corpiño bordado cristales transparentes con un velo majestuoso, recubierto de cristales.

Renato Balestra

Renato Balestra centró su propuesta en la diosa de la belleza de la espuma del mar, Venus. Por ello, sus creaciones evocan gran ligereza y la paleta de colores se centró en el azul, celeste y marfil pálido, casi como una segunda piel.

Las transparencias también jugaron un rol fundamental dentro de esta colección, que gracias al tul y hilos de organza evocó la espuma del mar y las algas.

El vestido de novia, dejado para el final, consistió una blusa transparente color marfil bordada con cristales para luego dar paso a una cascada de tul.

Sabrina Persechino

La arquitectura suele estar presente en la inspiración de la diseñadora Sabrina Persechino, quien en esta ocasión rinde homenaje a la Expo 2015. Por eso, en esta colección evoca al Palacio de Cristal, la Torre Eiffel y el Palacio Italia, siendo estas elegantes estructuras sus musas.

La colección contempla diseños largos, a la rodilla, pero también pantalones largos y cortos. La paleta de colores abarca el color rosa, verde y negro, inspirados en las ventanas de los edificios.

También se apreciaron sastrería con tallas, grabados elegantes en gasa, costillas y decoraciones de la piel y bordados, además de unos modernos tocados.

Piccione

Chales de pieles, diversos estampados y diseños de cuello cerrado, fueron la base de la colección que presentó el diseñador Salvatore Piccione, la cual posee una fuerte influencia del Asia Oriental.

La paleta de colores se basa en el negro, el blanco, el rojo, el marsala y el azul, mientras que los diseños se caracterizaron por ser faldas y vestidos cortos, chaquetas y capas con flecos. El bordado a mano fue un elemento central.

Cristales Swarovski blancos, esmeraldas y rubíes capturaban la luz creando diversas impresiones de profundidad que emulaban un mapa.