"Tron" es una película de ciencia ficción producida por los estudios Disney el año 1982. Dirigida por Steven Lisberger, es protagonizada por un joven Jeff Bridges que encarna a Kevin Flynn, presumido programador de videojuegos para una megacompañía tecnológica.

Las cosas se complican cuando el dueño de la empresa empieza a desconocer acuerdos de ganancias económicas y autorías en las creaciones de Flynn, quien -molesto- decide retirarse.

Pero el dueño de la compañía tecnológica decide profundizar sus acciones hiperproductivas y exige el desarrollo de un programa central que le quita ideas y trabajo a los programadores. La situación llega al punto de que el único que puede solucionar este puzzle es Flynn.

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No muy convencido acepta el reto, pero todo cambia cuando es absorbido digitalmente dentro del mundo real del programa central. Para intentar el triunfo, Flynn debe enfrentar los mismos juego que él ha creado, aunque la única forma de vencer es encontrar a "Tron", un programa de seguridad.

Así las cosas, la trama futurista se desarrolla en medio de un complejo contexto digital y virtual. Aunque suena atractiva, lo cierto es que la recepción al filme no fue de las mejores, pero con el paso del tiempo logró convertirse en una gran película de culto.

Tanto, que casi treinta años después, en 2010, un grupo de inversionistas decidió llevar adelante la segunda parte de la historia, a cargo del debutante Joseph Kosinski, quien la rodó en un intenso 3D, producida por el mismísimo Lisberger (el primer director). A cargo de la música estuvo nada menos que el dúo frances de música tecno Daft Punk.

Realizada con una modernísima estética dominada por el azul eléctrico, su propuesta visual no dejó indiferente a nadie. Fueron varias las revistas de moda que se entusiasmaron con el look propuesto. Pero no sólo ellos: también los seguidores de motos.

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Y es que el modelo usado por el protagonista para transportarse, denominada Lightcyle (porque literalmente es una "moto de luz"), se convirtió inmediatamente en un manjar para los fanáticos de las dos ruedas.

Creada por los hermanos Marc y Shanon en su propia fábrica de sueños motores llamada  Parker Brothers’ Choppers, especializada en crear vehículos varios para películas varias, Lightcyle estuvo a punto de salir a la calle con un modelo idéntico al de la película.

El proyecto quedó un poco trunco debido a las complicaciones para homologarla a las condiciones industriales y de seguridad requeridas para su fabricación masiva.

Sin embargo, para saciar la espera de los fanáticos, la solución llegó rápidamente a través de la prestigiosa casa de subastas Sothesby's: este 2 de mayo, bajo la nomenclatura "lote 259", sale a remate la misma moto usada en la película.

El vehículo incorpora un motor eléctrico de 96 voltios y un pack de baterías de litio que proporcionan la corriente necesaria para funcionar. Con una velocidad punta de 160 km/h y un recorrido autónomo de unos 160 kilómetros, existe verdadera pasión en el mundo tuerca por la famosa Lightcyle.

El chasis está fabricado a base de fibra de carbono y fibra de vidrio, con un marco de acero endurecido. Las ruedas, lo más característico y lo que más vuelve locos a los fanáticos, ya que -además de sus grandes dimensiones- pareciera que no tuvieran eje, tienen unas medidas de 22” x 12”, y montan unos neumáticos exclusivos desarrollados para la ocasión.

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La postura inicial para quedarse con el cinematográfico vehículo se sitúa entre US$25.000 y US$40.000, pero los expertos apuestan que superará ese monto.

Lightcycle tiene las siguientes características:

- Motor eléctrico de 96 volts
- Baterías de litio
- Acelerador controlado por computador
- Suspensión delantera con pre-carga
- Suspensión trasera rígida
- Sistema de frenos hidráulicos
- Asiento a 28 cms. del suelo
- Neumáticos a medida Hoosier