¿Alguna vez ha escuchado aquello de que puede quemar una caloría simplemente dando un clic en su mouse? Rhett Allain, un profesor de física de la Universidad de Luisiana, en Estados Unidos, respondió con escepticismo cuando su hija le comentó el supuesto dato científico. Por eso, en su más reciente columna en la revista Wired el físico refutó el mito.

“¿Quieres quedarte clicando ese mouse hasta quemar esa kilocaloría? Bueno. Tendrás que hacer clic 10 millones de veces. Y, si das 10 clics por segundo (que es bastante rápido), debes quedarte cliqueando durante 11.5 días. Estoy seguro que quemarías más energía respirando”, señaló Allain en su columna.

El físico comienza explicando que, en primer lugar, una caloría es una unidad de energía. ¿Cuánta energía? La que se necesita para elevar la temperatura de un gramo de agua en un grado centígrado.  Multiplique eso por 1.000 y obtendrá una kilocaloría. Y esas, las kilocalorías, son las que vienen impresas en los empaques de los alimentos y de las que la gente del común habla cuando se refiere a las calorías.

¿Y entonces cómo comprobar que efectivamente estamos quemando una kilocaloría cada vez que damos clic? Sencillo: mediante la fórmula física que calcula la relación entre el trabajo y la energía. La fórmula que asegura que el trabajo ejercido sobre un objeto (es decir, la cantidad de energía aplicada a un objeto) es igual al producto de la fuerza (F) y el desplazamiento (s). Algo así: W = Fs

El científico calculó que la fuerza aplicada a un mouse no supera los 0,5 newtons: es lo que necesita para mover una masa de 50 gramos. Y, en cuanto a la distancia que ay que desplazar esa masa, bueno… no es más de un milímetro. Al multiplicar esas dos cifras, el físico encontró que se un clic quema 10-7 kilocalorías.

Finalmente el físico remató su columna asegurando que para quemar un poco más de una caloría, alguien que pesa 70 puede más bien subir dos pisos por las escaleras, o tratar de mover un compartimiento con el peso de cinco a siete personas.