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8 usos del jengibre que benefician tu salud
Avalado por algunos estudios científicos, es un ingrediente que puede ser incluido fácilmente en nuestro día a día.
Seguro ya lo conocés de vista y capaz que hasta lo estás usando para dejar a las comidas más sabrosas, darle un toque diferente al mate o hacerte aguas saborizadas en casa. Te contamos de sus beneficios, cómo usarlo más y si realmente es para ti.
El jengibre, Zingiber Officinale, es una planta medicinal originaria de los bosques tropicales del sudeste asiático.
Se reproduce por rizomas que cuando son nuevas tienen una pulpa picante y muy aromática; cuando son tiernas se usan como condimento, tanto frescas como secas o encurtidas – el típico jengibre que nos traen con el sushi – y en todo tipo de recetas, dulces, saladas, agridulces, sea en platos de almuerzo o cena, en horneados y en múltiples bebidas.
Desde sus bosques tropicales en Asia llegó a el resto del mundo; los griegos antiguos y los romanos lo usaban y es parte de mútliples recetas típicas de Europa, como los famosos “Gingerbread men”.
Medicina China y Medicina Ayurvédica
Además de estos usos culinarios super diversos, forma parte del arsenal terapéutico usado desde hace milenios por las medicinas China y ayurvédica, esta última originada en la India.
Sus aplicaciones en estas medicinas tradicionales son tan variadas como las gastronómicas: se usa para tratar gastritis, nausea, vómitos, artritis, reumatismo, dolores musculares, fiebre, dolor de garganta, gingivits, asma, diabetes, hipertensión, tumores.
Los Enormes Beneficios
Con esta larga lista de posibles usos terapéuticos, no es de extrañar que el jengibre sea super estudiado buscando elucidar sus acciones; si buscamos en revistas científicas arbitradas encontramos más de 3400 trabajos de investigación. Año a año el interés aumenta; el año pasado se publicaron 290 y en lo que va del 2019 ya hay más de 180.
¿Cuál es el veredicto?
Se han aislado más de 40 compuestos químicos en el rizoma, que son responsables de su aroma y de su característico sabor picante. Estos fitoquímicos tienen actividad biológica, es decir que influyen sobre diferentes acciones celulares. Acciones tan diversas explican por qué es plausible que actúe en patologías también diversas.
Uno de los efectos del jengibre es inhibir la formación de compuestos oxidativos que al acumularse en las células generan cambios perjudiciales en su funcionamiento. Otro es modular la síntesis de compuestos inflamatorios – actúan de forma similar a los AINE, los analgésicos que todos usamos, lo cual explica su uso para el dolor en el reuma y la artritis.
Otros compuestos del jengibre tienen acción antibacteriana y actúan tanto a nivel de nuestro tubo digestivo, protegiendo la microbiota saludable como a nivel respiratorio.
La salud de la microbiota es clave para la nuestra y es probable que varios de los buenos efectos sobre la salud digestiva se basen en esto. También son útiles para la gastritis pero fuera de los momentos de empuje.
Uno de los usos más investigados está en el tratamiento de náuseas y vómitos de variados orígenes, incluyendo los relacionados al postoperatorio y a los efectos secundarios de varios medicamentos.
¿Puede haber efectos negativos?
La Food and Drug Administration de los EEUU la pone en su lista de GRAS (Generalmente Reconocido Como Seguro), pero otras fuentes desaconsejan su uso en el embarazo – aunque otras lo recomiendan para tratar los vómitos del embarazo.
Si vemos su valor como alimento es ante todo un condimento, pero no deja de aportar pequeñas cantidades de potasio y magnesio – en la sumatoria todo ayuda!
Así que podemos usar el jengibre cuando queremos algo rico y seguramente si notamos que nos sentimos mejor de la gripe o nos duelen menos las articulaciones podamos adjudicárselo al jengibre.
8 Formas de Usar Jengibre
- En el mate (sea sobre la yerba o en el agua)
- Infusiones (es perfecto con limón, cúrcuma y miel)
- Jugos Verdes & Smoothies (potencialos con jengibre raíz o en polvo)
- Aguas Saborizadas caseras (el clásico: limón, menta y jengibre)
- Guisos y sopas (condimentá con un toque picantón)
- Stir-Fry (es un clásico en los saltados estilo oriental)
- Chía Puddings (mezclalo en el pudding o usalo de topping)
- Horneados (anímate a probarlo galletitas o panes, no hay como errarle)
*Maren Torheim es autora del libro "Como comer sano para adelgazar". Trabaja desde hace más de 30 años en policlínica y piso, en uno de los sanatorios más importantes del país. Se formó en Uruguay y también en el extranjero, profundizando en la dieta cetogénica para el control de epilepsia.Siempre ha priorizado el trabajo en equipo, y desde hace más de dos décadas integra un equipo interdisciplinario con un cardiólogo y psicólogas para el cambio de hábitos, y con neurólogos y neuropediatras en la dieta cetogénica. Más recientemente Maren se dedica a un emprendimiento familiar de alimentación detox y saludable, ofreciendo cursos online con coaching nutricional en TanVerde.