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Cerro Otto, una sorpresa de 360 grados en Bariloche

Por LifeStyle | 20 Abril, 2016 - 11:35
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A más de 1.400 metros sobre el nivel del mar, este lugar tiene una ubicación realmente privilegiada. No sólo se obtiene una de las mejores vistas de la ciudad y del lago Nahuel Huapi, también hay mucha entretención.

 
 
A sólo cinco kilómetros del centro de Bariloche se encuentra el cerro Otto, un lugar que ofrece variados panoramas para disfrutar aún más la atractiva ciudad austral argentina.
 
A más de 1.400 metros sobre el nivel del mar, el cerro Otto tiene una ubicación realmente privilegiada. No sólo se obtiene una de las mejores vistas de la ciudad y del lago Nahuel Huapi, también hay mucha entretención.
 
Una de ellas es su teleférico. Para llegar a la cima se debe ascender por una góndola que tiene capacidad máxima para cuatro personas. El ascenso demora poco más de diez minutos, en el que –a través de una cabina vidriada- es posible apreciar el intenso paisaje. 
 
 
Ya en la cima existe un complejo turístico que cuenta con una exclusiva confitería que lentamente va dando un giro, permitiendo al visitante disfrutar de una vista panorámica total en 360 grados. 
 
A ello se suma, por cierto, lo mejor de la repostería artesanal con un exquisito chocolate caliente o platos típicos de la gastronomía de la zona como truchas en distintas preparaciones, picadas de ahumados o simplemente sándwiches para quienes prefieren comidas rápidas.
 
Existe también una galería de arte que cuenta con obras del artista Miguel Ángel Buonarroti (calcadas directamente de los originales y certificadas por el gobierno de Italia) y un microcine, en el que se proyectan documentales sobre el Parque Nacional Nahuel Huapi y sobre la historia de Bariloche. 
 
El complejo cuenta –además- con un renovado Rincón Infantil, terraza panorámica diseñada para los más pequeños en donde pueden recrearse y divertirse con sus juegos.
 
 
Existe también el desarrollo de actividades al aire libre, como deslizamientos por la pendiente de la montaña, cruce del puente colgante, recorridos por el Laberinto del Bosque y la Cabaña de los Espejos Deformantes, ascensos en el funicular de la cumbre y caminatas por todo el entorno boscoso.
 
Cuando llega la nieve, se suma el deslizamiento con trineos  por pistas con curvas peraltadas, de más de 300 mts de extensión y caminatas con raquetas por el bosque. 
 
Al finalizar la temporada invernal, las pistas se tapizan de material vinílico y la actividad se realiza en Otto Karts, inmensos gomones inflables estilo canadiense. Una vez que se llega al final de las pistas, y para optimizar el tiempo de disfrute en la montaña, se puede ascender nuevamente hasta la largada en el funicular.
 
Quienes quieran llevarse recuerdos de esta experiencia en las alturas, hay una góndola para tomarse fotos imitando variadas “piruetas”, como si estuviesen en pleno vuelo, pero se está en tierra firme.
 
 
Todo eso a sólo cinco kilómetros desde el centro de Bariloche. Desde la intersección de las calles Mitre y Villegas salen constantemente buses gratuitos hacia el cerro, que hacen el recorrido ida y vuelta.
 
Las otras alternativas son contratar una excursión que incluya este paseo en su recorrido o llegar en vehículo propio
 
La ciudad de San Carlos de Bariloche se ubica en la sureña provincia argentina de Río Negro. Con reservas naturales, que incluyen lagos, bosques y montañas, además de destacados centros de esquí, es posible visitar la zona en cualquier época del año.