Es el único país sudamericano en la lista de honor o “top-ten” de Lonely Planet. Se trata de Chile, elegido como “El mejor destino para conocer en 2018”.

No en vano, las autoridades esperan la llegada de 3,4 millones de visitantes extranjeros durante la temporada de verano de 2017-18, lo cual representa un aumento de 21,% versus los 2,8 millones de turistas de la temporada anterior.

En la colección “Best in Travel 2018”, los editores de Lonely Planet destacan a Santiago como una parada obligatoria debido a sus numerosas atracciones y su accesibilidad gracias al sistema de Metro.

A continuación, Catalina Cea, representante de la franquicia londinense Strawberry Tours, que realiza tours gratuitos y opera en Santiago, recomienda los imperdibles de la capital chilena.

Este cerro, punto de referencia de fácil localización, se eleva contradictoriamente en la mitad del centro de la capital. Fue aquí donde comenzó Santiago a ser ciudad hace 476 años cuando los nativos le llamaban Huelén. (El conquistador español Pedro de Valdivia fundó allí la ciudad en 1542).

Hoy es un hermoso parque con vista al casco histórico y un castillo en su cumbre. Es imperdible por su vista de la ciudad, su historia y por la posibilidad de descansar entre áreas verdes en medio de la vorágine céntrica.

Plaza de Armas, punto de encuentro

Desde la colonia se consolidó como el corazón de la vida social santiaguina y lo sigue siendo. Hoy se aprecian muchos turistas, inmigrantes, artistas callejeros y retratistas, o a los ancianos jugando dominó.

Aquí también se concentran la mayoría de edificios históricos de Chile, como la Catedral Metropolitana o el Museo Histórico Nacional.

Al lado norte de la plaza se encuentran los antiguos bienes gubernamentales de la Colonia. La sede del correo por ejemplo fue en un principio la casa del conquistador Pedro De Valdivia.

Barrio Lastarria, a la vanguardia

Al igual que otros barrios antiguos de la capital, Lastarria tiene una segunda vida, luego de que muchos santiaguinos se mudaran a mediados del siglo pasado hacia el sector oriente.

Hoy se destaca por su belleza arquitectónica, sus restaurantes muy variados, centros culturales, algunos museos, pequeñas tiendas de diseño independiente y galerías de arte.

Parque Quinta Normal, el más bello

En el siglo XIX la familia Portales recibe como herencia los terrenos sobre los que se asienta el Parque. En su interior cohabitan muchos museos, hay una laguna para pasear en bote y juegos de agua. Esto lo transforma en un rincón especial de Santiago para hacer un picnic por la tarde.

Desde 1976 de tiene categoría de Santuario de la Naturaleza, gracias a su variada flora y hace poco fue destacado por la revista “Travel and Leisure” como uno de los parques más bellos del mundo.

Los pasajes Adriana Cousiño, Lucrecia Valdés y Rodríguez Hurtado

Emplazados a pocas cuadras de la Quinta Normal, son el más puro ejemplo de la vida de barrio del Santiago de principios de 1900. Estos tres pasajes fueron construidos por los más destacados arquitectos de la época como Cruz Montt y Larraín Bravo, Downey Mozó, Rojas Santa María y Garafulic, entre otros.

Además de su preciosa arquitectura los inmuebles tienen el estatus de monumento nacional y han sido muy cotizados por artistas e intelectuales. Son elementos claves del barrio Yungay y la arquitectura chilena.