Artículos

La magia que gira en torno a la vendimia de Mendoza

Por Loreto Oda Marín | 8 Marzo, 2016 - 15:32
  • vendimia_festival_csecretaria-de-turismo-de-mendoza.jpg

Esta fiesta vitivinícola es una de las más importantes de Argentina y una de las destacadas a cielo abierto en el mundo.

"Si no lo vives, es difícil imaginarlo". Eso es lo que dicen varios argentinos de la famosa Fiesta Nacional de la Vendimina realizada en Mendoza, la que en su reciente versión cumple 80 años, luego de que en 1936 se declarara un decreto para oficializar el Día de la Vendimia.

Esta celebración festeja el tiempo de cosecha para la producción de vino, por lo que es un momento muy especial para esta zona evidentemente vitivinícola, constituyéndose en el evento más importante de la provincia y Argentina, además de ser una de las más relevantes a cielo abierto del mundo.

"La historia cuenta que hay manifestaciones de festejos desde 1913, si bien el gobierno oficialmente la incorpora a la agenda en 1936", cuenta Gabriela Testa, presidenta del ente provincial de turismo de Mendoza.

Toda la ciudad vibra en torno a esta tradicional celebración que cada año reúne a uno 60.000 turistas, de los cuales el 70% son argentinos y el 30% extranjeros, entre estos últimos principalmente chilenos y brasileños. Es por esto, que la capacidad hotelera está casi siempre a tope.

Incluso, en oportunidades las autoridades locales han tenido que habilitar albergues y derivar a algunos visitantes a otros departamentos, todo con tal de atender la demanda turística.

Mariana Juri, secretaria de Cultura, Turismo y Desarrollo Económico, señala que "lo cierto es que la Fiesta Nacional de la Vendimia ya se constituye en un evento muy tradicional y al menos Mendoza, la ciudad anfitriona, en esta fecha se llena siempre. Más allá de la cantidad de turistas, nos tiene contentos que podamos ofrecer una oferta cultural muy linda y variada y que la gente la disfrute mucho".

Además de ser un hecho cultural y turístico, la fiesta es un evento político, porque vienen representantes de muchos gobiernos del mundo, embajadores, agregados comerciales, autoridades nacionales; se aprovecha la instancia para plantearle a las autoridades cuáles son las problemáticas del vitivinicultor de la zona. "Hay una evaluación de acusar recibo de la problemática que hay", acota Testa.



La fiesta

Durante estas semanas toda Mendoza gira entorno al vino. La celebración comienza el lunes 28 de febrero con la “Bendición de los Frutos”, ceremonia donde se agradece a Dios los frutos sanos obtenidos de la cosecha.

Como es tradición, la festividad continúa el primer viernes de marzo con la “Vía Blanca de las Reinas”, un desfile de carros alegóricos lumínicos que transportan a las candidatas al cetro y a las antiguas dueñas de la corona.

Desde hace días que se venden entradas para poder ocupar los palcos ubicados en la vía pública, todo con tal de tener una mejor vista al espectáculo.

La gente se agolpa en las calles para apoyar a su candidata y recibir de sus propias manos los regalos que tienen para las personas que las van a ver. Uvas, vinos, frutos secos, botellas de agua, son algunos de los souvenires que las personas reciben de parte de hermosas mujeres aspirantes al trono.

Gauchos de todas las edades montados caballo o a pie y representaciones que apelan a la Argentina más rural y originarios también se conjugan con este moderno espectáculo.

Acá también desfilan la reina y el rey de la Vendimia Gay, una manifestación que llama a la inclusión y que muchos conocen como "Vendimia para todos".

"Nosotros los mendocinos tenemos una gran fiesta y la gente se maravilla porque hay alegría por todos", afirma el intendente de la ciudad, Rodolfo Suárez.

A la mañana siguiente se presenta el “Carrusel de la Vendimia”, que son los mismos carruajes, pero esta vez acompañados de diversos grupos folclóricos de varios países de América Latina, como Perú, Chile y Bolivia.

El espectáculo, que apela a la unidad latinoamericana, también se puede apreciar desde el Park Hyatt Mendoza Hotel, que mantiene su tradicional facha pero cuenta con modernas instalaciones. Allí, se reúne lo más destacado de la socialité mendocina, por lo que es común ver a autoridades y algunos famosos en los palcos mientras se produce el desfile en el que no faltan las demandas ciudadanas.

Ese mismo sábado por la noche el punto de encuentro es el Teatro Griego Frank Romero Day, donde se lleva a cabo el “Acto Central”, un espectáculo folklórico de gran envergadura que donde también se da a conocer el nombre de la nueva reina de la vendimia y se lleva a cabo su coronación, siendo uno de los momentos más esperados.

Este año fue la representante de Luján de Cuyo, Giuliana Lucoski -una de las favoritas- la que se quedó con el título de Reina Nacional de la Vendimia, siendo coronada ante 21.000 asistentes.

"Esta vendimia tiene una particularidad porque es una fiesta que no se le parece a otras y tiene una cobertura territorial que no tiene otra fiesta, no es una sucesión de cuadros musicales en un escenario, sino que es una puesta en escena a través de una gran cantidad de artistas. Este año la temática tendrá un guiño al aniversario de los 80 años de vendimia y los 200 años de la independencia argentina", puntualiza Testa.

En esta oportunidad participan 1.050 artistas, entre músicos y bailarines de distintas disciplinas. Todos eran mendocinos, los cuales audicionaron meses antes con tal ser parte del espectáculo.

Es así como sobre el escenario se ven diferentes representaciones artísticas, juegos de luces y sonido, donde se incluyen bailes de diversos países de América Latina, dándole un caracter internacional al espectáculo que conmueve, incluso hasta las lágrimas, tanto al público nacional como extranjero.

Otro momento de alta emotividad fue cuando se realizó un homenaje a varios músicos argentinos. Uno de los primeros que apareció en las pantallas gigantes fue Gustavo Cerati, seguido de Charly García y Luis Alberto Spinetta.

Los fuegos artificiales lanzados desde el “Cerro de la Gloria” son los encargados de dar por terminado el evento, mientras miles de personas agitaban banderas albicelestes y algunos de los presentes, orgullosos de su país, gritaban y cantaban consignas de argentina.

Pero el festejo no termina ahí, dado que posteriormente se realiza la "Vendimia Para Todos" en el Arena Maipú, donde se monta un espectáculo y se escoge a los nuevos reyes gays.

El "Acto Central" es repetido lunes y martes, día que en que se cierra esta festividad que va más allá del vino y que se queda metida en la piel. Una celebración que para entenderla a cabalidad no queda más que ir y vivirla.

* Fotografías Loreto Oda y Gobierno de Mendoza