No es un secreto que la familia Kardashian-Jenner es millonaria. Sólo Kim cobra más de US$ 500.000 por auspiciar a una marca en su Instagram -en una foto-, el maquillaje de Kylie se vende en cosa de minutos y Kendall asciende a diario entre el listado de las modelos mejores pagadas. Esto, sin considerar el ingreso que les deja su reality show Keeping Up With The Kardashians.

Es por lo mismo que cuando miles de personas vieron su oferta en el portal laboral Entretainment Careers, pensaron que las empresarias ofrecerían un millonario contrato y un gran desafío. Sin embargo, no fue así.

Tal como muestra el aviso publicado por Jenner Communications (su compañía) la familia busca un pasante que trabaje a medio tiempo sin ningún tipo de remuneración. En la publicación detallaron que necesitan a un estudiante de instituto de educación superior que pueda convalidar créditos con sus estudios, y no a alguien egresado, porque sólo pueden ofrecer eso.

De la misma forma, exigen que el interesado viva en Los Ángeles (Estados Unidos), tenga auto propio, sea activo, fiable, con agilidad mental, ideas frescas y extremadamente organizado. ¿Para qué tantos requisitos? Para hacer mandados, comprar en el supermercado, ayudar con el perro, atender a los niños y envolver regalos de caridad… entre muchas otras “actividades”.

“Aprenderás sobre la industria del entretenimiento”, agrega el aviso que pide que el estudiante pueda trabajar lunes, miércoles y viernes durante vacaciones, y después.

Como era de esperar, la propuesta laboral causó una fuerte polémica puesto que ni siquiera cumpliría con los requisitos de una pasantía. A esto, se sumaron los comentarios de antiguos pasantes de las Kardashian-Jenner quienes aseguraron que era un trabajo “para nada recomendable”.

“La gente que trabaja ahí es extremadamente mezquina y no dedican tiempo a responder tus preguntas. Nadie se preocupa por ti (…) Muchas tareas de poco valor, estúpidas y sin sentido”, escribió un expasante, quien además opinó que esta “oferta” debería “ser ilegal” porque no sirve como pasantía, en el sentido educativo.

Finalmente, la vacante no duró más que un par de horas; sin embargo, se desconoce si la familia lo cerró ante la polémica o encontró a alguien que estaba dispuesto a convertirse en su “sirviente”.