Para este invierno hay dos tendencias claras si de maquillaje de ojos se trata. Una de ellas son los ojos ahumados o smokey eyes, que si bien ya había marcado pauta en otras temporadas, solo lo había sido con los negros y grises, mientras que ahora la paleta amplía su espectro, destacando los azules y verdes.

Los "ojos mariposa” mezclan tonos verdes, morados y azules con otros colores más luminosos imitando los colores de algunas mariposas.

La otra es el delineado de ojos de gato o cat eyes trazado con eyeliner de distintos tonos. Este recurso, estilo Cleopatra, causó furor en los años 40 y 50.

La idea es alargar el trazo para estilizar el ojo. Se puede completar con unos toques de sombra gris oscuro por debajo de las pestañas inferiores, mientras que en la parte interna se usa un lápiz blanco para dar más intensidad a a mirada.

Al momento de ver cuáles serán los colores de moda, se debe elegir el negro; azules oscuros, como el azul petróleo; grises, también oscuros como el gris plomo o el grafito; morados y burdeos. En general, resaltan  los colores oscuros y los metalizados.

Estos colores se caracterizan, entre algunas cosas, porque salen de lo común y ayuda a darle más vida al rostro.

En especial el morado, ya que según el make up artist de Inglot, Ramón González, "ayuda a no lucir cansada y es un color que siempre suma a todas las personas, ya sean blancas o morenas o rubias, pelirrojas o castañas".

Este color queda bien con marrones, dado que según el profesional, "es una mezcla muy natural y queda perfecto para el día, con tonos azules en más monocromático pero audaz de todas formas, y si quieres marcar tendencia y no pasar desapercibida recurre al círculo cromático y elije su color complementario: amarillos y naranjos”.

La combinación verde agua y azul fue una tendencia que se evidenció en las pasarelas de Nueva York y Milán, mezcla que aplica tanto para el maquillaje como para la ropa.