Sin duda, Noruega es el país donde la movilidad eléctrica ha avanzado más en su adopción. El caso de China es llamativo por el impresionante esfuerzo industrial que ha hecho el gigante asiático. Pero en el país nórdico, en proporción a su número de habitantes, es donde existe mayor densidad de vehículos eléctricos.

Pero el pasado mes de septiembre se han alcanzado unas cifras verdaderamente récord. Durante esos 30 días, se vendieron 10.620 nuevos coches en el país. De todos ellos un 45% fueron eléctricos. Totalmente eléctricos, ni híbridos ni híbridos enchufables. Es decir, casi la mitad del parque vendido en septiembre no lanza emisiones a la atmósfera.

Y aún es más, si se suman los coches híbridos enchufables (aquellos que tienen una pequeña batería con cierta autonomía y la combinan con un motor de combustión), el porcentaje sube hasta el 60%. Es una cifra altísima de adopción para coches eléctricos en Noruega.

La estadística también señala que más de 2.000 correspondieron a vehículos de marca Tesla. Los diésel, en cambio, cayeron. Y los datos reflejan lo positivo de las ventas. Los nuevos coches matriculados lanzan una media de 55 gramos de CO2 por kilómetro, lo que supone un descenso de 16 gramos frente a los matriculados en septiembre de 2017.

La ambición eléctrica de Noruega

El país escandinavo tiene el objetivo de que todos los coches que se vendan sean eléctricos para 2025. La evolución de las ventas parece ir en ese sentido. En 2017 el 52% de los automóviles que se compraron en el país eran híbridos o eléctricos. La cifra venía de un 2016 donde este grupo de vehículos alternativos suponían el 40%.

Pero parece ser en 2018 cuando la tendencia se ha vuelto más pronunciada. El mes de septiembre es una muestra récord de cómo está yendo el año. Si bien no se puede tomar como norma, se espera que los coches eléctricos en Noruega vayan a más. El mercado también ayudará. Pronto el Model 3 de Tesla estará disponible comercialmente en esas latitudes y modelos de otros fabricantes le sucederán.

La infraestructura del país se ha preparado durante los últimos años para este advenimiento de coches eléctricos. Es allí donde ya en 2016 se creó una superestación de carga, con capacidad para 28 vehículos a la vez. Los incentivos del gobierno y la concienciación de los habitantes reman en la misma dirección.