El Observador | Las rutas en mal estado derivan en general en daños para los vehículos y gastos extra para sus propietarios. Teniendo en cuenta condiciones difíciles de este tipo, ingenieros de Chevrolet desarrollaron una serie de consejos para ayudar a los conductores y sus autos a sobrevivir a los pozos.

 

 

Estar alerta ayuda. Hay que escanear los potenciales pozos para evitarlos de manera segura. "Si es imposible esquivar un bache y el conductor no lo puede evitar, lo recomendable es bajar la velocidad. Golpear un bache a mayor velocidad incrementa la probabilidad de dañar el vehículo", explica el Ingeniero de Productos de General Motors Central, Manuel Avendaño,

 

 

Bajo pozos con agua puede haber agujeros profundos. Después de la lluvia, lo mejor es evitar los charcos de agua ya que pueden ser un riesgo.

 

 

Inflar de manera apropiada los neumáticos pueden hacer una diferencia significativa al momento de pasar sobre un bache, por lo que es importante mantener la presión recomendada por los fabricantes. "Si el neumático no tiene suficiente aire el bache puede producir una ruptura, y por el contrario, si está muy inflado es incluso más susceptible de dañarse", comenta Avendaño.

 

 

En el caso de golpear un bache, asegúrate de chequear tu auto inmediatamente para ver cualquier daño posible que pudiera haberlo afectado. Evaluar de manera temprana los daños previene que estos se transformen en mayores.

 

 

Los pozos no causan solamente daños en los neumáticos, sino que también pueden haber problemas en el sistema de escape o la alineación del auto. "Si el conductor siente que el vehículo está haciendo ruidos, se desvía hacia un lado o está operando de manera irregular, hay que asegurarse de llevarlo donde un profesional para ser asesorado y tener certeza de qué es lo que le pasa al auto", explica Avendaño.

 

 

Asegúrese de tener un gato hidráulico o una llave dinamométrica en tu auto, y que la rueda de repuesto esté inflada con la presión adecuada, en caso de que necesites usarla.