Artículos

Tomasa del Real: "El neoperreo no es reguetón, no es cumbia, no es electrónica, es perreo"

Por El Espectador | 11 Diciembre, 2018 - 09:43
  • tom_11chat_drupal_main_image.var_1544476842.jpg

La artista chilena es uno de los rostros actuales de uno de los nuevos ritmos latinos que mueven las fiestas.

Desde su local de tatuajes en Iquique (Chile), Valeria Cisternas comenzó a hacer música con un portátil que le regaló su mamá. Ahora es una de las embajadoras de la nueva ola del reguetón a la que ella llama neoperreo.

El reguetón se entiende como un ritmo caribeño con raíces africanas. ¿A qué se debe que un personaje como usted haya surgido desde Chile?

Los sudamericanos escuchamos mucho reguetón, porque está en nuestras vidas desde hace diez años, desde cuando salió “La gasolina”. Nuestra música bailable, popular, es el reguetón. En Chile no hay ritmos más fuertes en las discotecas que ese; tal vez la cumbia. Yo soy del norte de Chile, de Iquique, cerca de Perú.

¿Cómo comenzó a hacer música?

Yo era tatuadora. Mi mamá me regaló un laptop y me empecé a grabar, a cantar en el computador por diversión. Comencé a subir videos en YouTube con mis dibujos de tatuajes, luego empecé a hacer estos videos, los colgaba en internet y la gente empezó a pedir más de ese tipo de reguetón que no es precisamente reguetón, es la influencia de este género en estos artistas pero es música para perrear. No es cualquier perreo, es una nueva era del perreo que nace de la era digital, del computador, de las herramientas digitales para crear música y editar videos.

¿Qué es el perreo?

El perreo es una fiesta. Ir a un perreo es ir a una fiesta donde vas a bailar con otras personas muy cerca, a tocarse entre ellas.

¿Y el neoperreo?

Un neoperreo es lo mismo, pero es una fiesta más respetuosa con la libertad de expresión. Hay más inclusión, no son fiestas heteronormativas como puede ser el perreo. Son fiestas con una expresión artística que tiene la intención de expandir los pensamientos hasta el respeto. Pensar en los límites pero con libertad. Es un espacio distinto al perreo convencional.

El neoperreo es una marca que usted creó, pero algunos lo sienten como un género…

El término salió de una entrevista cuando trataba de definir de qué se trataba esta nueva ola del género. El neoperreo no es reguetón, no es cumbia, no es electrónica, es perreo. Este perreo se volvió un estilo de vida, como una subcultura. Así como en el rock and roll en su momento existía y de ahí nació el rockabilly donde se vestían diferente, escuchaban algo diferente, tenían peinados diferentes pero conservaban la misma esencia. Esto es algo similar, el reguetón creó este subgénero; el neoperreo no es que yo lo haya inventado, solo es que yo lo bauticé. La vida hizo que yo dijera la palabra indicada, en el momento indicado y que tratara de hablar más al respecto.

¿Este nuevo perreo es un espacio seguro?

Sí. Es un espacio seguro donde están todos invitados. Los de la nueva ola de este reguetón tenemos la cultura de internet, donde los géneros no nos importan, donde nos vestimos diferente, donde somos gente de varias partes del mundo. Se llama neoperreo porque en el perreo normal no encajamos.

¿De qué hablan sus canciones?

Canto lo que se me ocurre en el momento, ahí lo voy inventando. Pero también canto las temáticas que me gustan que vienen del reguetón clásico y lo que canto no es muy diferente de lo que canta un hombre, porque cuanto hago una letra no me siento diferente a él. Yo sé que llama la atención que una chica hable de términos sexuales explícitos, pero para mí yo soy un cantante de regueton. Canto lo que cantamos todos los reguetoneros, no le tengo prejuicio a mi género.

¿Cuáles son las criticas que recibe?

Algunas veces me han dicho que debería cantar otro tipo de cosas, algunas mujeres me han sugerido cantar ideas de ellas, pero yo pienso que decirle a una mujer qué hacer es un poco machista.

¿Cuál es la cuota de humor en su trabajo?

Todo mi trabajo es un 100 % humor, es una performance, es arte.

¿En alguna entrevista dijo que le gustaría hacer un “feat” con Shakira y J Balvin?

Sí, me encantan. Ahora me gustaría con Bad Bunny o Manuel.

¿Cuál es esa estética que dice que es distinta del neoperreo al reguetón?

A través de redes logramos conectarnos con personas a las que nos gustan los colores, la cultura racing de motos, rápidos. Lo deportivo, cómodo pero glamoroso con mucho bling bling. Para mí se trata de jugar con lo de las marcas y las joyas. Decir antes no tenía nada y mira ahora lo que tengo, estoy orgullosa de lo que tengo.

¿Cómo se siente de firmar con un sello como Nacional Records?

Estoy muy feliz de que en una disquera que tiene a grandes artistas llegue alguien que salió de internet. A mí como que me pasó lo de ser cantante, por eso es una bendición para mí que me haya pasado eso, haber firmado y poder seguir haciendo música y poder aportar de una manera real a una generación.