El fabricante de motos Ducati pertenece a esta categoría de empresas con motores de alto rendimiento alumbradas en Italia tras la Segunda Guerra Mundial. La compañía es, sin embargo, una excepción. Sus compañeros de este grupo serían Lamborghini (creada en 1963) y Ferrari (fundada en 1929, solo empezó a producir en serie en el 47).

El recorrido de Ducati tiene su propia peculiaridad. La compañía se fundó en Bolonia en 1926 en un contexto industrial. En aquel momento el negocio estaba en los aparatos de radio y esto es lo que fabricó hasta después de la Segunda Guerra Mundial **. En 1952 y tras una alianza fabril, la empresa pasó a diseñar su primer ciclomotor**.

Desde ese momento han pasado casi 70 años, una ristra de modelos producidos, la alta competición y la compra por Audi. Con este bagaje afronta Ducati el diseño de su primera moto eléctrica. Un tipo de vehículo al que le ha costado más hacer el cambio de motor que a los coches.

Sin embargo, el cambio será más rápido en motos. Tal vez los fabricantes de automóviles se hayan puesto manos a la obra antes, pero las motocicletas maniobran más rápidamente. Así, una vez que marcas como Piaggio –con su icónica Vespa– o Harley-Davidson han anunciado modelos eléctricos , el pistoletazo de salida ya está dado.

La Ducati eléctrica solo viene a confirmar esta tendencia en la industria del motor de dos ruedas. La compañía ya ha desarrollado un prototipo junto a la Escuela Politécnica de Diseño de Milán. En anteriores ocasiones el fabricante señaló su interés en un vehículo eléctrico. Incluso llegó a ponerle fecha de salida a su nueva motocicleta: 2021. Pero ahora se mantiene prudente.

El futuro será eléctrico
Aunque una cosa sí tiene clara el CEO de Ducati Claudio Domenicali: "El futuro es eléctrico. No estamos lejos de empezar la producción en serie". Sin fecha, sí, pero con el horizonte claro. La compañía, como muchas otras en los últimos años, ha despertado al motor eléctrico.

Las compañías de sharing son las que más han tirado del carro de las motos eléctricas, de momento. Pero entradas en el mercado como la Ducati eléctrica o el nuevo modelo de Harley avivarán la demanda de los particulares.

Aunque también hay otro mercado para las motos eléctricas. Las hay más baratas, claro, como la Vespa, o como las que ofrecen las compañías de sharing. Algunos de estos fabricantes también venden a particulares. La parte más low cost del mercado se puede encontrar en India. La compañía Hero Electric ofrece su producto por un precio imbatible: el equivalente a 300 euros.