Cuando se trata de salud o de mantener una alimentación saludable, entender la etiqueta con la información nutricional puede ayudar al momento de hacer un buen mercado o escoger qué llevarte a la boca.

Bebidas o alimentos empaquetados, por protocolo, deben llevar la información nutricional donde se especifica qué y cuánto contiene. Está dividida en tres partes y aunque parezca complicado, leerla es más fácil de lo que parece.

¿Para qué sirve la información nutricional?

- Comparar alimentos similares para escoger el más bajo en calorías, grasas y sodio.

- Reconocer las cantidades importantes de nutrientes como fibra, calcio, hierro y vitamina C.

¿Cómo leer las etiquetas?

1. – Identifica el tamaño de la porción: suelen expresarse en tazas, pedazos o unidades. Es importante identificar cuántas raciones contiene porque la información nutricional se expresa en base a cada una estas cantidades.

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2.– Confirma la cantidad de calorías y grasas: las siguientes cifras que se reflejan en esta tabla son las calorías y grasas. Un alimento que tenga cero grasas no implica que aporte cero calorías. Este elemento es fundamental al momento de decidir si comerlo o no.

3. – Guíate en los porcentajes recomendados para el consumo diario: una persona debe consumir entre 2000 y 2500 kcal al día. Lo ideal es que 50 o 60% de la alimentación provenga de carbohidratos, entre 25 y 30% deben ser grasas buenas y de 12 a 20% que sean proteínas. Los alimentos que no se recomiendan en exceso deben aportar 5% o menos del valor diario. Si contiene 20% o más debe tratarse de alimentos ricos en vitaminas, minerales o fibra.

4. – Cuidado con los nutrientes: el consumo adecuado es la clave. Aunque parezca insólito, las grasas, el colesterol y el sodio no deben eliminarse por completo, solo se debe controlar su ingesta. De igual forma, el carbohidrato, azúcar, fibra, proteínas, vitaminas y minerales son fundamentales en cualquier dieta que busca ser balanceada.

Cuando se quiere llevar un estilo de vida saludable, puede llegarse al extremo de contar todas y cada una de las calorías que se llevan a la boca, más allá de eso hay que enfocarse en los nutrientes que aporta. La idea de conocer el significado de estos valores es controlar el consumo, informarte del contenido de dicho alimento y ser referencia al momento de tomar la decisión: si comerlo o no.

Dato curioso: en la lista de los ingredientes, el orden de los mismos está reflejado en base a su cantidad. Mientras más predomine este elemento, ocupará los primeros lugares.

* Nota El Estímulo