"Brunapoli" apuesta por ser un pedazo de Italia en Santiago de Chile, específicamente de Nápoles, ciudad de la que proviene el chef de este restaurante, Raffaele Medaglia.

Es por esto, que la decoración de este lugar, ubicado en Mall Vivo Los Trapenses en La Dehesa, tiene varios elementos que buscan evocar ese territorio italiano, ya sea mediante sus adornos o su vajilla, confeccionada especialmente para el restaurante.

La bella y sobria ambientación de este lugar, inaugurado en noviembre, ayuda a vivir una buena experiencia culinaria, la cual se apoya en una carta que rescata preparaciones tradicionales y de autor, tanto en la comida como en la coctelería.

Para empezar, una opción son los antipastos. Acá se pueden encontrar varias alternativas, siendo la Melanzane alla parmigiana una buena elección por sus sabrosas berenjenas que se complementan de muy buena forma con la salsa de tomate, la mozzarella y el parmigiano dop.

Dentro de los bebestibles, el Cetriolo, a base de pepino, el limón y la menta, es ideal para partir o si se quiere disfrutar de un cóctel fresco y suave.

Una de las especialidades de la casa son las pizzas, las cuales encantan por su balance de sabores y su masa delgada cocinada, en máximo, dos minutos al horno.

Las preparaciones se apegan a lo tradicional, por lo que las variedades no suelen tener muchos ingredientes y como son finas y livianas perfectamente una pueden ser para una persona.

La pizza Raffaele es emblemática y una de las destacadas dentro de la carta, dado que, según cuenta el chef, ha ganado dos premios -en 2006 y 2012- por la Pizzaioli Verace Napoletana. Esta preparación es cuidada celosamente por Medaglia, quien llega media hora antes al local para elaborar la secreta base. Uno de los encantos de esta pizza son los pistachos, ingrediente que le da una personalidad especial.

Dentro de las opciones más clásicas está la Bufalina Dop, la que representa una buena combinación de sabores, con una agradable textura, gracias a una masa bien lograda que no sobresale dentro de la preparación.

Para ambos casos, un prosecco resulta ideal para acompañar.

A la carta se suman las ensalada, sopa y las infaltables pastas. Si se quiere algo con mariscos, el Spaghetti allo scoglio es una gran alternativa, pues su sabrosa preparación y frescura hacen que sea una plato bien logrado, al igual que los Gnocchi al 4 formaggi. En ambos, los ingredientes se complementan sin que se roben protagonismo entre sí.

Para terminar, están los postres como los imperdibles Scialatelli fritti - con nutela y pistachos-, la Panna cotta, con una agradable textura, y el Tiramisú, hecho con café italiano por lo que le da potencia y personalidad.

"Brunapoli" es una cocina con dedicación y cariño, que se remonta a las tradiciones italianas, por lo que las bien logradas preparaciones se potencian con las buenas materias primas utilizadas, varias traídas desde Italia. Tal ha sido la acogida, que a principios del otro año pretenden instalar un segundo lugar en la capital chilena, para luego ver la posibilidad de llegar a otros países de América Latina, donde se quiere seguir llevando los sabores de Nápoles.