Reseña

"Crash Bandicoot N Sane Trilogy": una dosis de nostalgia muy bien hecha

Por Rubén Barboza / Especial para El Espectador |  11 Julio, 2017 - 15:38
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La resurrección de la trilogía original del personaje de Sony para PlayStation 4 está hecha con cariño y ofrece un muy buen juego de plataformas.

A finales de los años 90, la franquicia de Crash Bandicoot quedó grabada en la memoria de los jugadores de esa época. Pese a esto, desapareció a medida que los juegos de plataforma evolucionaron y perdieron popularidad. (Lea "'Horizon Zero Dawn': el placer de cazar dinosaurios robots")
 
Lo bueno es que este título ha vuelto y trae muchos cambios que lo hacen atractivo para los jugadores modernos. Crash Bandicoot vuelve a la PS4 con su N Sane Trilogy. La probé un buen rato y les tengo algunas impresiones.
 
Lo primero para decir es que, aunque N Sane Trilogy se vende como una remasterización de los tres primeros juegos de Crash Bandicoot, que fueron lanzados en la PlayStation original, la realidad es mucho más alentadora.
 
 
Al ser un juego creado desde cero, sin ningún código y con muy escasos recursos provenientes de la trilogía original, Vicarious Vision (los desarrolladores) hizo una nueva versión de los juegos (lo que los gringos llaman remake) que en gran medida logra capturar la nostalgia de uno de los primeros juegos de plataformas 3D.
 
La trilogía sigue siendo vibrante y colorida. Vicarious Vision hizo un excelente trabajo para calcar los niveles originales, las intros y animaciones. También aprovechó y reformó algunas texturas y les dio más detalle para que estén a la altura de la expectativa gráfica de la actual generación de consolas.
 
Debo confesar que la nostalgia se me alborotó cuando vi a Crash, después de tantos años, siendo tratado con tanto cariño y atención a los detalles que lo hicieron grande. La música también juega un papel fundamental ahí y, si bien los desarrolladores se han tomado algunas libertades, sigue siendo la misma música animada y pegajosa que nos persigue desde la niñez.
 
La jugabilidad, en gran parte, sigue siendo la misma, lo cual es una buena noticia. Crash Bandicoot no se hizo famoso por ser un juego aburrido. Pero hay algunos cambios para tener en cuenta. Uno de ellos es que, en los juegos originales, la superficie de las plataformas en el juego era mucho más cuadrada, dando la ventaja de que era posible pararse en el borde sin caer; ahora, el juego tiene un diseño más redondo, es decir, al intentar quedar en la misma posición riesgosa que en los juegos clásicos, el resultado es que vas a rodar hacia tu fin. El juego no te concede el beneficio de la duda por caer mal parado sobre las superficies. Parece un cambio minúsculo, pero que, al no ser suficientemente preciso, será la causa de varias muertes.
 
Hablando de precisión, hay otro cambio: si bien entre los juegos de PlayStation, a Crash sólo se lo controlaba con el D-Pad, es decir las flechas del mando, ahora se puede utilizar el joystick. Cada uno debe elegir cuál método considera mejor. En lo personal, si bien el viejo D-Pad es más molesto de usar, siempre ofrece más precisión que el joystick, aunque este último les da mayor fluidez a los niveles.
 
Con el revitalizado diseño de Crash también encontré algunos problemas que dejan en evidencia ciertas áreas poco pulidas del juego, que en ocasiones pueden acentuar injustificadamente la dificultad del mismo. Esto se suma a la engañosa percepción de profundidad que de por sí tiene este tipo de juego de plataformas.
 
 
Un ejemplo de ello puede ser cuando uno deja presionado X para realizar un salto alto y el juego en ocasiones no lee el comando adecuadamente. También, en el área en donde uno golpea a los enemigos o estos golpean a Crash (el llamado hitbox en inglés), da la impresión de que puede ser más amplia o más reducida aleatoriamente, dejando un sabor amargo al morir de manera injusta e inesperada.
 
Una última molestia es la cantidad de tiempo de carga del juego y la frecuencia con la que hay que esperar. Esto es más notorio cuando quieres reiniciar un nivel, pero para hacerlo debes salirte del mundo y volver a entrar, ya que en el menú no hay un botón de reinicio que agilice la jugabilidad. ¿Podría solucionarse esto con una actualización a futuro? Tal vez. Ojalá. (Lea "'Resident Evil 7': terror del bueno")
 
Esta entrega demuestra que el viejo Crash sigue siendo igual de divertido. También introduce nuevas variantes, como poder jugar con Coco, la hermana del personaje principal, la cual sólo podía ser utilizada en el tercer juego de la trilogía original. Son cambios bienvenidos que celebro.
 
Los nuevos jugadores que desconozcan la serie deben saber que se encuentran con un juego de plataformas sencillo en su diseño, por lo que si están esperando un reto enorme deben buscar en otra parte. De todas maneras les recomiendo que lo prueben. Y si usted es fan de la trilogía original, le tengo una buena noticia: N Sane Trilogy es una muy merecida compra para revivir el pasado.