En un pequeño y acogedor local de la comuna de Lo Barnechea, en Santiago de Chile, se encuentra "Hong Kong Blue", la nueva apuesta del ya clásico restaurante de la capital chilena, "Palacio Danubio Azul".

Esta propuesta contempla nuevos sabores -los que representarían cerca del 40% de la carta- y algunos de los clásicos, pero con algunas variantes para hacerlos más livianos.

Para lograr un buen resultado, el chef ejecutivo, Juan Manuel Astudillo, viajó a China y Estados Unidos, para rescatar sabores e inspiraciones.

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Como se trata de un restaurante familiar, hay platos para todas las edades, algunos pensados especialmente para los niños. Por eso, se pueden encontrar papas fritas y postres más occidentales, como cupcake, helados artesanales, dos tipos de cheescake y el Hong Kong Waffle, que puede ser relleno de manjar, nutella o puré de castañas.

Para empezar, están los dumpling de tocino con queso crema y ciboulette o de pato asado y ciboulette, destacando ambos por su potente y suculento relleno y su suave masa de arroz.

También hay un goloso wonton de cerdo asado, cebollín y queso Philadelphia, que posee una crujiente y bien lograda masa, presentada de una particular manera, destacando los ingredientes del interior. A esto se suma un crepitante spring rolls de pollo teriyaki.

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Para los amantes de las sopas, hay dos tipos, siendo una de ellas la intensa Wonton, con unos tersos fideos de huevo, wonton de cerdo y láminas de cerdo asado. Otra alternativa es la Crema Victoria Peak, de gran personalidad y con una impronta algo más thai, gracias a las notas de coco y especias.  

Los amantes del sushi tienen 16 variedades con influencia nikkei. Uno de ellos es el Maguro Tataki Hot Roll, relleno de congrio arrebozado, queso crema y cebollín, envuelto en láminas de atún rojo grillado con toques de ají frito y crocante de zeste de limón y salsa unagui, logrando un rico picor. Otro es el Sake Spicy Blue el que no lleva arroz y que en su interior tiene camarón furay, queso crema, ají y cebollín, cubierto de salmón y envuelto en nori con salsa spicy.

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Al momento de pensar en los fondos, hay diversas posibilidades que van desde las pastas hasta un sabroso chaufan de quinoa.

Es así como se puede degustar de un prometedor, pero no tan deslumbrante, fetuccini de fideos de arroz al wok a la albahaca con camarones ecuatorianos, lemon grass, tomate cherry y pesto con leche de coco; y de un pato asado a fuego lento bañado en salsa de naranja, de buen sabor y textura.

Este local cuenta con patente de alcohol, por lo que en la carta se ofrece aperitivo, espumantes, cervezas y vinos, tanto por botella como por copa. Además, tiene servicio delivery y de retiro en el local, es decir, variadas alternativas para disfrutar de esta amplia gama de sabores asiáticos.