Reseña

Restaurante "Anakena" renueva sus preparaciones thai

Por Loreto Oda Marín |  4 Marzo, 2016 - 07:11
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En la última renovación de carta se hicieron algunas modificaciones para entregar una experiencia más genuina en sabores, iniciativa que va de la mano con la incorporación del chef tailandés Nirut Pochsalee.

Sabores que son capaces de transportar al sudeste asiático. Eso es lo que propone el restaurante "Anakena", del Hotel Grand Hyatt Santiago en Chile, con la llegada del chef tailandés Nirut Pochsalee y la renovación de ciertas preparaciones, que buscan otorgarle un impronta más auténtica a la propuesta gastronómica.

La carta, que cambia cada seis meses, incluye varias recetas clásicas de Tailandia, las que son enunciadas en el idioma de ese país y en español, detalle que le da más autenticidad a la experiencia. Acá se podrá encontrar lo tradicional de esta cocina -amargor, salado, picor y el dulzor- jugando, practicamente siempre, en armonía.

Para empezar, se puede optar por diversas entradas (Kong Wuang), sopas, spring roll fresco (Popia Sod) y ensaladas, como la Yam Nua Yang, una fresca preparación a base de cebollín, cilantro, tomate, apio, pepino, filete de res grillado con aderezo picante y abundante jugo bien sazonado.



También hay satay marinados en leche de coco, curry, pickles al estilo thai, salsas de maní y de ostras y soya, las cuales son moderadas en picor y se complementan bien con los diferentes tipos de carne. Estas brochetas son de vegetales, pollo, calamar, pulpo, cerdo, filete de res o mixto y van acompañadas de una porción de pepino y cebolla marinada, una guarnición
común en Tailandia.

Además, se pueden encontrar los tradicionales geng, curry preparado en base a leche de coco. Los hay de diferentes tipos y niveles de picante, por lo que se puede elegir entre el rojo, el verde y el amarillo.

Por ejemplo, el Geng Kari, que es curry amarillo con pollo, es un plato bien logrado que es capaz de trasladar al comensal a Tailandia, tanto por su aroma como por sus potentes sabores, donde se hace presente un agradable e intenso picor.

Otro imperdible a disfrutar de este restaurante que se encuentra en medio de los jardines del hotel es el Pad. Dentro de los seis tipos que ofrece la carta está el clásico Pad Thai, que puede ser de pollo, camarón o ambos.



Esta preparación encanta por la estructura y sabor de los suaves fideos salteados en salsa de tamarindo que se combinan perfecto con los camarones, vegetales y brotes, logrando un plato agridulce que adquiere croncancia gracias al maní molido que lo acompaña.

En postres (Kanum Warn), el menú incluye sabores más clásicos, como ensaladas de fruta de la estación y helados, además de otros más característicos de Tailandia como el Tako Kra Ti, un budín Thai de arroz y leche de coco; y el Kau Niew Ma Muang, arroz glutinoso y mango.



También se puede encontrar el Popia Kloai, crujientes rollos de plátano estilo thai acompañados de una salsa de coco que cautiva por la sensación que genera cuando entra en contacto con el paladar, su color y su sabor, siendo en boca como una especie de manjar. Una opción ideal para el verano por su frescura es el Saku, a base de leche de coco, fruta de temporada y perlas de tapioca, las que aportan en textura.

Una de las innovaciones de Pochsalee es la implementación de la técnica milenaria china llamada Carving o Mukimono, la cual consiste en tallar artísticamente frutas y verduras convirtiéndolas en verdaderas esculturas que son exhibidas en el lugar, al igual que en los tradicionales banquetes que se realizan en países como Tailandia, porque la idea de "Anakena" es brindar una experiencia completa en la que el comensal pueda viajar gracias a un bocado y el ambiente directamente al sudeste asiático.