Todo comienza con el asesinato de una importante, empoderada e independiente ejecutiva bancaria, Clarisa de Landa, quien es encontrada muerta en el living de su casa.

Este hecho, que conmociona al sector influyente y poderoso en Chile, desata una completa investigación por parte de un equipo policial encabezado por Óscar Morante, quien trabaja muy de cerca con la psicóloga forense Adriana Vallejos.

A medida que se avanza en el libro, surgen varias hipótesis sobre su muerte, así como posibles autores del crimen, por lo que la atención se mantiene ante un ameno y rápido relato en el que se desarrollan bien los ambientes y las personalidades de los personajes.

Es así como sale a la vista el misterioso entorno de Clarisa de Landa, los prejuicios ante una mujer exitosa sin una pareja fija en un mundo prácticamente dominado por miradas conservadoras, el oscuro ambiente financiero y empresarial que envuelve a la víctima y todos los que trabajan con ella, siendo el poder, el dinero, la ambición y la envidia algunas de las constantes.

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También queda al descubierto el entorno de Morante, sus análisis al momento de realizar su trabajo y la soledad que siente tras sufrir un duro golpe emocional producto de la separación con su esposa. Es así como el libro matiza, en un buen equilibrio, la investigación por resolver el crimen y la vida de los protagonistas.

Este trabajo, en el que el escritor chileno Mario Valdivia debuta en este género, logra mantener la atención del lector, quien emprende un entretenido viaje en busca de la verdad detrás del asesinato, situación que no entrega mayores pistas hasta estar cerca de su fin.

Si bien el misterio queda resuelto, nada dice que el comisario Morante no pueda volver a la acción con un nuevo caso por resolver.